viernes, 13 de junio de 2014

Moodle y Claroline: Características, pros y contras.

En una primera aproximación Moodle resulta poco intuitivo y poco atractivo, con gran cantidad de paneles: administración, navegación, actividades mensajes, últimas noticias, etc. La ventaja es que todo esto es configurable, pudiendo recogerlos y colocarlos en una barra lateral, además de personalizarse mediante plugings para el formato de los cursos, o incluso creando themes teniendo conocimientos de HTML y CSS, tal y cómo podemos ver en la página de moodle https://moodle.org/plugins/browse.php?list=category&id=3. Cuenta con muchas opciones de configuración, entre ellas, y a diferencia de Claroline, permite renombrar los roles de los participantes.

Una de sus ventajas es que, como citan en “Analizamos 19 plataformas de E-learning”, permite añadir una gran cantidad de actividades y de recursos: establecer tareas con opciones de configuración como plazos y formas de entrega; el chat; un glosario; una base de  datos; un foro; consultas a los estudiantes (choice); encuestas; crear grupos; ejercicios de diferentes tipos; wikis; y las lecciones donde podemos crear itinerarios de aprendizaje, si bien parecen itinerarios abiertos ya que puedes salir y acceder al resto de recursos. Esto también puede hacerse mediante el módulo LAMS, si bien esta opción no hemos podido probarla. Destacan la  posibilidad de integrar herramientas externas desde otras web que permitan LTI (http://developers.imsglobal.org/catalog.html), además de añadir recursos y actividades empaquetadas con SCORM. Entre los recursos se pueden incluir contenidos maquetados como un libro, incluir archivos, crear una página web, añadir URLs y también los contenidos empaquetados IMS. Una opción muy interesante y no disponible en Claroline es la de hacer copias de seguridad que pueden ser restauradas posteriormente. Como desventajas, no integra de serie, al igual que Claroline, la videoconferencia o las redes sociales, lo cual se critica en http://www.xarxatic.com/no-solo-se-puede-vivir-sin-moodle-es-que-se-vive-mejor-sin-el/, sin embargo, existen módulos que permiten integrarlos como por ejemplo para skype https://moodle.org/plugins/view.php?plugin=mod_skype.

Por su parte, Claroline presenta un entorno más ordenado y atractivo que Moodle, como contrapartida no permite configurar la interface y colocar los bloques según las preferencias de cada uno. Es muy fácil de utilizar, tal y como comenta en el libro citado “Analizamos 19 plataformas de E-learning”. Desde el escritorio podemos crear cursos, inscribirnos, ver el resto de cursos, etc. La configuración del curso es sencilla. Una vez creado contamos con un único panel situado a la izquierda para configurarlo. Al igual que Moodle, dispone de un editor de textos similar al de cualquier procesador de texto, con la posibilidad de incorporar tablas, imágenes, vídeos, etc. Entre las opciones disponibles tenemos: realizar la descripción del curso; establecer una agenda; anuncios; incluir documentos y recursos; ejercicios y consulta de resultados; establecer secuencias de aprendizaje, nuevas o importadas (SCORM); crear trabajos aunque con menos opciones de configuración que en Moodle; crear foros; establecer grupos; incorporar usuarios; una wiki; y una zona de debate (chat). También nos permite editar la lista de herramientas, añadir enlaces externos (URLs) al curso como por ejemplo un formulario, y consultar las estadísticas. 

A modo de resumen, la principal ventaja de Claroline es que su interface es muy sencilla y atractiva, resulta más fácil de configurar y el tiempo de adaptación es por tanto más rápido, sin embargo cuenta con menos actividades, opciones de configuración, y alternativas que Moodle, que es menos amigable en principio, pero mucho más versátil. 

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