El tiempo juega un gran papel a la hora de elegir una herramienta de aprendizaje.
Muchas veces nos encontramos delante de una herramienta que puede ser muy completa pero que al ser poco intuitiva consigue sacar de ti un rechazo hacia ella más que un intento de utilización. La idea podría estar muy bien reflejada en el artículo que nos ha dejado noudos de la revista Linux.net.
Estos días he hecho una prueba:
Le he pedido a una compañera que se planteará el montar un curso y le he mostrado de dos en dos las 4 plataformas que he elegido.
Hay que decir que no conocía ninguna de las 4 plataformas ni como alumno ni como profesor y que mis conocimientos de ellas tampoco son para tirar cohetes.
He empezado por Dokeos y Claroline y he seguido con Moodle y Lams.
La reacción ha sido bastante distinta en cuanto ha visto los entresijos de las diferentes plataformas.
Por mi intervención anterior conocéis que mi elección ha sido Moodle pero la conclusión a la que he llegado es que a veces debemos ver como adecuadas herramientas que, aunque sean más simples y, quizás, menos completas, son más intuitivas, y si cumplen con las necesidades formativas que deseamos cubrir, deben ser las elegidas!
Mientras estábamos navegando para resolver algunas dudas que nos han salido, me he encontrado con estos recursos sobre LAMS que me han gustado mucho y quisiera compartir con todos vosotros, sobretodo la presentación que nos hace la oveja Dolly sobre LAMS.
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