miércoles, 16 de enero de 2013

Moodle ¿Si ó no? Y sobre todo... ¿por qué?


En los últimos 7 años he estado trabajando en un proyecto de Fundación Telefónica que ofrecía la plataforma Moodle para el desarrollo de sus cursos y en este proyecto mi misión era dar formación inicial a los responsables de los diferentes grupos de trabajo y asesoramiento y apoyo durante el desarrollo de la experiencia.

Inicialmente trabajamos con una plataforma propietaria pero debido a nuevas políticas de la empresa (F.T.) se cambió a una herramienta de software libre, eligiendo, después de un importante análisis trabajar con Moodle, que recogía las herramientas utilizadas hasta ese momento y permitía una menor dependencia del proveedor inicial.

Al comienzo el servicio se ofreció a profesores universitarios que querían apoyar la formación presencial con una plataforma online y poco a poco se fue extendiendo a instituciones, organizaciones no gubernamentales y sobre todo a equipos que trabajaban en la formación con personas con dificultades para acceder a la formación reglada. El entusiasmo de los primeros profesores posibilitó que el proyecto saliera adelante ya que era gente sin ninguna formación informática, pero que suplía sus carencias con entusiasmo, valentía y paciencia, y sobre todo una mentalidad abierta que les permitía enfrentarse a la nueva situación con espíritu de cambio, algo fundamental en este medio, en el que, a veces, se pretende trasladar (sin adaptar) la formación tradicional al nuevo medio, perdiendo muchas de las ventaja de ambos sistemas, y convirtiendo la plataforma en un repositorio de pdfs sin aportar ningún valor añadido.

Sin entrar en la parte de desarrollo e instalación inicial en un host apropiado (que requiere de gente con unos mínimos conocimientos informáticos, aunque no demasiado complejos y que cuenta con el apoyo de una comunidad de soporte importante: https://moodle.org/?lang=es ) de esta experiencia puedo sacar algunas conclusiones, tanto positivas:
  • Plataforma intuitiva para el usuario final (perfil estudiante)
  • Contiene todas las herramientas básicas que necesita una formación online (comunicación, contenidos, documentación, estadísticas, evaluación …)
  • Los recursos se pueden crear en múltiples formatos, por lo que no hay que tener conocimientos avanzados de informática (documentos de texto, HTML, adjuntar archivos en cualquier formato,…)
  • Facilita el trabajo colaborativo.
  • Estructura modular que permite incluir mejoras y nuevos elementos.
  • Gestión de secretaría sencilla y completa.
  • Una vez realizado el primer curso la actualización y mantenimiento es cómoda y permite rentabilizar esfuerzos.
Como negativas:
  • Los perfiles creador de contenidos, profesor, tutor… necesitan un manejo adecuado de herramientas informáticas y web básicas.
  • La personalización y el diseño son más limitados que en una plataforma propietario.
  • Dificultad para elaborar itinerarios personalizados, sistemas cerrados.
  • El primer curso requiere de mucho trabajo y esfuerzo extra (como casi todo en informática, y en contra de la idea más popular, la informática no ahorra tiempo…, no ahorra tiempo en un primer momento, es una inversión (muy rentable, eso sí) a medio y largo plazo).

En las siguientes páginas podemos encontrar numerosos puntos de vista y algunos interesantes testimonios que completan estos aspectos:
http://www.xarxatic.com/tag/moodle/ (Moodle, una relación de amor y odio)

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